Me apena mucho como todo comenzó, pero…mira cómo continuó. Llegué a la Plaza Francia de Altamira un día cualquiera, dispuesta a que sucediera cualquier cosa. Las sorpresas jamás se hacen esperar. Ví a un hombre de pie (Gustavo), con pinta de viajero, hablando con otro (Joel Chirinos) que descansaba sobre la grama, al lado de un perro despeinado. Pensé torpemente que Gustavo andaba en las mismas que yo, pero más equivocada no podía estar...
hola, joel me complace y conmueve demasiado tu trabajo, las obras de frida me parecen una genialidad las amo, la de andy asomandose pues igual, me fascina el misticismo con el cual trabajas las piezas escultoricas, la relacion del presente y el pasado con perfecta coherencia, simplemente un artista del mañana. espero leas pronto mi mensaje. con amor manuela.
ResponderEliminartu valentia y razon sobre que una imagen expresa todo los instintos es sorprendente y cierta, el domingo te compre un libro GRECIA.
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